23/7/09

5ª ETAPA

ALAGÓN/ALFARO

KM. 90´36
TIEMPO 5:30:18
MEDIA 16´41 KM./H.
MAXIMA 36´51 KM./H.

08/05/09

Aún con el cuerpo destrozado por el esfuerzo realizado en la zona de Los Monegros hace un par de días, salgo con la idea de hacer solo unos 60 Km.,distancia que separa Alagón de Tudela. Esa era la idea,pero debido al buen estado de las pistas y al alegre ritmo que he marcado desde el principio me he presentado en Tudela a las 13´30 h. Al ser muy pronto para buscar alojamiento, he decidido arriesgar mi pobre trasero y hacer 30 Km. mas de lo previsto inicialmente y llegar hasta la población de Alfaro.
En realidad esta es una de las ventajas de hacer en solitario el Camino de Santiago; hay que hacer caso al cuerpo. Si te pide mas, dale mas. Si te dice que pares, pues hazle caso y para. Y todo esto puedes hacerlo sin rendir cuentas con nadie. Si vas acompañado, es muy difícil que los dos vayan al mismo ritmo. O bien yo tendré que bajar el ritmo para adecuarme al tuyo, o bien tendré que correr mas de la cuenta para ir al ritmo del otro. La compenetración también tiene que ser muy grande para que dos o mas personas puedan hacer sin problema alguno tantos y tantos Kilómetros de convivencia. De todas formas puedo constatar que hay momentos en que hubiera agradecido enormemente tener compañía, sobre todo a la hora de tomar ciertas decisiones delicadas. En fin que creo que el Camino hay que hacerlo en solitario…si quieres compañía, la encuentras, sobre todo a partir de Logroño…
He salido de Alagón a las 8´40 h. en dirección a Cabañas de Ebro , a continuación y a través de un paisaje muy agradable llego a Alcalá de Ebro donde encuentro una estátua de bronce de Sancho Panza en homenaje al escritor Miguel de Cervantes, justo al lado de una plantación de arboles ( ? ) que han soltado todo su polen, dándome la sensación de estar viendo una nevada de cierta intensidad. Después de las fotos de rigor, me monto en la burra y giro a la derecha siguiendo un canal. Enseguida me doy cuenta que me he equivocado, hala, para atrás y vuelvo a saludar a Sancho Panza que sigue en actitud pensativa. Ahora si que veo las flechas, estaban detrás de una furgoneta. Enfilo por la ruta correcta en dirección a Luceni siempre con el Ebro a mi derecha.


La mañana es estupenda ,gracias tanto a la excelente meteorología como a la baja dificultad técnica de los caminos por los que estoy circulando.
Es agradable ver como de vez en cuando el rio se te va acercando hasta colocarse a tu lado, acompañándote durante unos kilómetros hasta que de repente desaparece bruscamente,dándote la sensación de que no volverás a verlo nunca mas. Nada mas lejos de la realidad ya que nos va a acompañar durante dos días mas, al menos hasta llegar a Logroño. A partir de ahí, si que lo vamos a perder irremediablemente…
Luceni, a partir de aquí las flechas me llevan por una carretera poco transitada hasta Gallur, siempre flanqueado a mi izquierda por las vias del tren. Unos cinco kilómetros antes he dejado a mi derecha el pueblo de Boquiñeni al cual no he tenido que entrar.
En Gallur descubro el Canal Imperial al cual seguiremos a lo largo de 21 Km. hasta llegar a El Bocal. Antes habremos pasado por Mallén, Cortés, Buñuel, que nos queda a nuestra derecha y no tendremos que entrar en el, y Ribaforada.
A partir de aquí, empiezan las complicaciones. Llego a una bifurcación donde tengo ciertas dudas. Observo como se me acerca un pastor acompañado de tropecientas ovejas que me aconseja que me desvie a la izquierda. Con cierta incredulidad hago caso omiso a mi salvador. De repente me encuentro con la via ferrea, la cual tengo que pasar por un paso subterráneo. Después de un par de cruces mas, me encuentro entre la N-232 que tengo que seguir a mano derecha pasando por su vial de servicio. Una via de servicio donde no pasa nadie y que está separada de la carretera por unas grandes vallas a derecha y a izquierda. Voy tirando en dirección a Tudela, ¡supongo!…pasan los kilómetros y sigo sin ver a nadie. De repente tuve un presentimiento. Las vias de servicio no se acaban de porrazo ¿ verdad ?…no, ¡claro que no!…van pasando los kilómetros y yo estoy empezando a acojonarme, hace mucho rato que no veo ninguna flecha, aunque la dirección parece ser buena, al menos eso es lo que indican los rótulos de la N-232. Al cabo de una media hora, veo a lo lejos, un puente que atraviesa la carretera. A medida que se va acercando me voy imaginando por donde pasará el vial de servicio cuando llegue a su altura…JEJEJE…no pasa por ningún sítio, se acaba ahí…no es posible, pienso, no puedo tener tan mala suerte. De frente está el puente, a la izquierda está la valla de la N-232. Por suerte a la derecha, campo a través parece que se ve un camino a lo lejos. Cargo la bici a la espalda como puedo mientras me voy arrastrando a través de unos matorrales mas altos que yo en busca del preciado camino…por fin, he llegado.
Que fuerte, el camino en cuestión va en dirección contraria a Tudela. No se que hacer, ni con la guía en la mano soy capaz de orientarme. Desesperado,veo una furgoneta que se acerca para cruzar el puente. Le doy el alto y le pregunto la ruta a seguir hasta Tudela…UUFFF…me ha tenido media hora, si lo se no pregunto. El buen hombre me hace un plano en un periódico y me aconseja el camino a seguir, lo cual agradezco enormemente. Me lo repite como unas veinte veces, yo mientras me voy montando en la bici y empiezo a alejarme pero el hombre sigue hablando…Vale, Vale, ya lo he entendido…adiós y grácias.
Llego a Tudela a la hora de comer, pero no tengo hambre, sigo adelante En dirección a Castejon que se encuentra a 19 Km. Otra vez vuelvo a ciclar con el Rio Ebro a mi derecha y la via ferrea a la izquierda. A medio camino paso al otro lado de la via hasta cruzar por debajo de la autopista AP-15. LLego a Castejón con un agujero tremendo en el estómago, tengo un hambre canina, hace muchas horas que no como nada. El problema es que es un poco tarde para comer de Rte y he de conformarme con tirar de pinchos en un Bar. No importa, dos pinchos de tortilla de patata y una birra son suficientes para saciar mi hambre y mi sed.
Ya solo faltan cinco kilómetros para llegar a Alfaro, mi destino.
He contactado con la Policía Municipal ya que no tengo ni idea de donde se encuentra el albergue municipal de diez plazas que me dice la guía. Me dicen que son ellos los responsables de dicho albergue y que no hay ningún problema en proporcionarme alojamiento. Previo control de documentación y credencial del Peregrino, me entregan las llaves y me indican que el albergue está al lado mismo de las oficinas de la Policía Municipal.
Grata sorpresa la mia, al descubrir que todo el albergue es para mi, no hay nadie mas. Imáginate una casa adecuada para diez personas, toda para mi solito…la bici en el comedor y yo en cualquiera de las habitaciones de arriba…un lujazo.
Después de una buena ducha, prévia inspección de la casa me decido a salir a hacer un poco de turismo, como siempre.
Aparezco en la Plaza de España ,donde aparece ante mi, la impresionante Colegiata de San Miguel ( siglo XVII ), en cuyos tejados vive la colónia urbana de cigüeña blanca mas grande de todo el mundo.
Después de unas cuantas vueltas encuentro un Bar con mucha marcha que se encuentra muy cerca de donde está mi alojamiento, una cervecilla para entrar en calor y a continuación un señor bocata de estos que se te cae todo por los lados de lo cargados que están, que pasada de bocata.
Mientras me dirijo a mi cubil voy pensando en la etapa de mañana, seguramente llegaré a Logroño, creo que hay aproximadamente unos 100 Km. Si el culo aguanta ahí estaré.
A partir de ahí encontraré previsiblemente la marabunta que baja del Camino Francés…se ha acabado viajar y dormir solo, seguro.

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